martes, 12 de diciembre de 2017

La libertad de expresión en campaña electoral debe ir acompañada de hechos, no suposiciones

Por Felipe Guadamuz Flores


la foto del perfil de Felipe G. Flores, La imagen puede contener: 1 personaLas redes sociales se han desbordado con mensajes anticorrupción donde cualquier persona contraria a ciertos intereses es tildada como “corrupto”. El electorado con menos educación aplaude la supuesta valentía de quienes llaman corruptos a todo un gremio o poder, pese a no tener las pruebas para ello. El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) no debe coartar la libertad de expresión de los candidatos a la presidencia, pero sí debe llamarlos a rendir cuentas cuando acusen a alguien de haber cometido una falta o delito o recurran a la religión para ganar adeptos.

Si bien es cierto que el artículo 136 del Código Electoral no establece límites a la libertad de expresión y, por ende, tampoco a la difusión de propaganda de los aspirantes a un puesto de elección pública en Costa Rica, ello no es obstáculo para entender que la interpretación de la ley debe darse utilizando otras normas y, sobre todo, teniendo en cuenta el interés de los electores, lo cual quiere decir que los candidatos deben expresarse de buena fe y si dicen que ocurrió tal o cual situación, también deben tener las pruebas que respalden eso que han dicho.

En otras palabras, si se llama corruptos a todos los miembros del Poder Judicial, quien dice eso debe tener las pruebas donde demuestre esa corrupción, pues si bien es cierto la inoperancia del Poder Judicial ha sido evidente en muchas situaciones, el llamar corruptos a todos y cada uno de los funcionarios de los altos puestos de ese poder de la República es, en lógica, una falacia de generalización, y si a eso se le suma el no aportar las pruebas correspondientes, entonces se incurre en otra falacia, que es la de elusión de la carga de la prueba.

Conviene analizar otro aspecto importante que el TSE ha dejado de lado: El proselitismo religioso en estas elecciones. Contrario a otros temas ya examinados, donde el Código Electoral no es claro en cómo abordar la libertad de expresión cuando de acusaciones sin aporte de pruebas se trata, en materia religiosa el Código sí es muy claro, pues no se permite invocar aspectos de ese tipo para que los electores voten de determinada manera.

Sin embargo hay ciertos aspirantes a la presidencia que se han valido de esto para convencer a los electores de votar por ellos, con el aval tácito del TSE. Existe una obligación oficiosa por parte de ese poder del Estado en no permitir el proselitismo religioso, bajo ninguna de sus formas, y el no hacerlo implica un posible incumplimiento de deberes, con las responsabilidades que ello tenga de acuerdo con la legislación penal. Los votantes deben ser convencidos con propaganda secular, pues en el momento en que a un candidato se le permite invocar aspectos religiosos se incurre en otra falacia conocida en lógica como “deus vult” y se deja de lado el pensamiento crítico y racional para adscribirse a determinado pensamiento teológico, inclusive si ese no es el de la mayoría.

Otro aspecto importante a tomar en cuenta es el trato desigual y discriminatorio que las autoridades electorales han aplicado en contra de la Iglesia Católica, mas no así en contra de las corrientes protestantes cristianas que participan en la actual campaña. El artículo 33 de la Constitución Política establece el principio de igualdad ante la ley, la prohibición de incluir la participación de la Iglesia Católica en procesos electorales es porque vivimos en un Estado laico, pero se entiende que no solo es contra la Iglesia Católica que esta veda se aplica sino también contra otros tipos de organizaciones religiosas, por lo tanto, en aras del principio de igualdad ante la ley, y respeto por lo expresamente indicado, el TSE debería sancionar las conductas proselitistas religiosas de ciertos candidatos que incurren en ellas.

Un rubro de trascendencia para analizar en el tema electoral tiene que ver con el hecho de poner a disposición del público el historial delictivo de los aspirantes a un puesto de elección popular, así como de aquellos que hayan representado a personas o intereses que podrían haber chocado en algún momento con el interés público. Un proceso político es controversial por naturaleza porque la controversia implica que haya dos o más puntos de vista contrarios donde se debe decidir por uno de ellos. Al objeto de la controversia, según García Damborenea, se le conoce como cuestión y esta puede ser de tres tipos: conjetural, nominal o evaluativa.

En la cuestión conjetural se debaten los hechos y se establece si algo pasó o no pasó. Una vez que se sabe si algo pasó o no, se recurre a darles un nombre a esos hechos, esa es la cuestión nominal. Después de nombrar los hechos se analizan con base en lo práctico que pueda ser seguir uno u otro camino y si es acorde o no a la moral y lo legal. Luego se toman esas tres cuestiones y se comienzan a crear planes de acción para por último tomar una decisión.

Hasta el momento casi ningún partido político ha publicado su plan de gobierno, por lo que los electores serios no podemos analizar qué es lo que proponen estos aspirantes a puestos de elección popular. Una cosa queda clara, no debemos ir a votar con el hígado ni mucho menos por tradición, sino que debemos ser prácticos y votar con conocimiento, sin dejarnos llevar por los cantos de sirena, pues a fin de cuentas es nuestro país y tenemos el gran privilegio de elegir a nuestros gobernantes. Sin embargo, privilegio implica también responsabilidad y somos corresponsables para con nosotros mismos, pero también para con nuestros conciudadanos y futuras generaciones, así que seamos críticos y racionales a la hora de votar. 

Nota: Este artículo fue publicado originalmente en el Diario Extra el 12 de diciembre de 2017

miércoles, 20 de septiembre de 2017

Mejoremos las redes sociales, eliminemos la basura

Por Carlos Vilchez Navamuel



Internet nos trajo comunicación al instante y con ello vinieron las redes sociales, un servicio realmente interesante y bueno que permite la comunicación entre personas sin importar el país en que vivamos, servicio al que tenemos acceso prácticamente gratis.

Algunas de estas redes sociales han logrado un alcance mundial, Facebook la más grande cuenta ya con 3000 millones de afiliados, Twitter, Linkedln y otras redes más brindan un servicio a las personas sin igual en la historia humana.

Sin embargo, con el tiempo vemos hechos y actos de personas inescrupulosas que ensucian las redes sociales, para quien esto escribe, estas personas no solo visitan su “casa digital” sino que la ensucian, le echan basura en su casa, a veces la escupen y otros además quieren hasta quemarla.

Sabemos que existen programas muy buenos que evitan los virus y los malware, pero eso no es suficiente, los usuarios podríamos ayudar a limpiar las redes ejecutando diferentes acciones.

Por ejemplo, no aceptemos gente que no conocemos o que no sea haya sido recomendada por un amigo, no compartamos información de fuentes dudosas ni compartamos cadenas de oraciones o de buenos deseos, tampoco compartamos solicitudes de ayudas para niños enfermos, ofertas de productos que no conocemos que nos dicen que son regalos, hemos visto cantidad de personas compartiendo lo que dicen que se ganarán unos boletos aéreos si compartes el sitio. Todas esas ofertas vienen de personas que buscan entrar a su computadora.

Otras formas de mejorar las redes sociales es no compartir noticias catastrofistas, alarmistas como las de que se han visto en estos días con respecto al terremoto de México y los huracanes que en lugar de ver lo positivo sobre estos fenómenos naturales que antes eras devastadores y que ahora con la tecnología previenen la muerte de cientos de miles de personas al estar mejor informados.

También abundan las noticias falsas o viejas fuera del contexto actual para engañar y confundir a las personas, tampoco deberíamos compartir noticias alarmistas, catastrofistas que lo único que hacen es asustar a los incautos, a los ingenuos y a los CREYENTES de todo y que no hacen el menor esfuerzo por verificar las noticias.

Pero lo más importante, si no limpiamos las redes sociales nosotros, otros nos obligarán hacerlo mediante leyes restrictivas que sin duda alguna arremeterán contra la libertad de expresión.

De allí que todos los que utilizamos estos servicios debemos mejorar las redes sociales eliminando los mensajes dañinos, falsos o eliminando a todas aquellas personas que le llegan “a ensuciar su sitio digital” al fin de cuentas aceptar estas cosas es como que ustedes acepten la entrada de personas a su casa y que ellos los insulten en la cara, le echen la basura al piso o le peguen goma de mascar en las sillas o sillones.  

viernes, 28 de octubre de 2016

Costa Rica muy bien clasificada en Libertad de Prensa 2016





Por Carlos Vilchez Navamuel

Excelentes noticias nos trae al país el sitio oficial de Reporteros sin Fronteras (RSF) que nos informa acerca del último estudio que publicó esta organización en abril de 2016.

RSF  nos dice que “La Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa, publica  desde 2002, una herramienta de promoción esencial, basada en el principio de emulación entre Estados. Su prestigio le ha permitido adquirir una influencia cada vez mayor ante las autoridades públicas nacionales. Numerosos jefes de Estado o de gobierno temen cada año su aparición. 2002 año de la primera edición de la clasificación”.

La misma fuente explica además que “La Clasificación es una referencia, citada por medios de comunicación de todo el mundo, empleada por diplomáticos y organizaciones internacionales, como las Naciones Unidas y el Banco Mundial, y la llevan a cabo en 180 países establecida con base en un criterio: el grado de libertad del que gozan los periodistas. Es una fotografía de la situación de la libertad de prensa, basada en una valoración de: el pluralismo, la independencia de los medios de comunicación, la calidad del marco legal y la seguridad de los periodistas en estos países. Así, no es un palmarés de las políticas públicas, incluso si, naturalmente, los gobiernos tienen una gran responsabilidad en la evolución de estos aspectos. Tampoco es un indicador de la calidad de la producción periodística de un país. Al realizar la Clasificación, RSF elabora tanto un índice mundial como índices por continentes, que permiten evaluar el desempeño general de los países en materia de libertad de prensa. Estos índices se obtienen haciendo el promedio de las puntuaciones de los países de la zona geográfica, ponderado con los datos de población del Banco Mundial.  

Los países que se encuentran  arriba en la lista son en primer lugar  Finlandia, seguidos de Países Bajos, Noruega, Dinamarca, Nueva Zelanda y COSTA RICA se ubica ahora en el puesto número 6 en el mundo, sí señores, cómo nos gustaría  aparecer de igual forma en los índices de LIBERTAD ECONÓMICA. Venezuela se encuentra en el lugar 139, México 149, Cuba en el 171 y Corea del Norte se sitúa en el puesto 179.

PSF añade en su sitio que “Costa Rica es el país mejor calificado de América Latina en libertad de expresión y derechos humanos, constituye una excepción en una región corroída por la corrupción y la inseguridad. A pesar de que el oficio periodístico se ejerce manera relativamente libre y de que existe una avanzada legislación en materia de libertad de información, se han registrado algunas prácticas negativas contra medios de comunicación, como el espionaje que sufrió el Diario Extra en 2014 por parte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ)”. https://rsf.org/es/la-clasificacion-mundial-de-la-libertad-de-prensa

domingo, 17 de abril de 2016

¿Noticias?

Por Constantino Urcuyo Fournier

Como politólogo soy un observador atento de la actividad mediática porque su influencia sobre la formación de la opinión política es abrumadora.

Sigo con sumo cuidado los telenoticieros por cuanto todas las encuestas señalan que este es el primer medio al que suelen acudir los ciudadanos para informarse.

Atendiendo la dinámica de los telediarios, cada día me asombra más su énfasis en la nota roja, particularmente en los allanamientos y decomisos por narcotráfico.

En inglés cuando se habla de noticias, se usa la palabra ”news” , o sea, lo nuevo, lo inédito. ¿Qué hay de nuevo, de noticia, en la repetición de allanamientos e informaciones sobre esa materia?

Está claro que es un problema serio que requiere de la acción represiva de las autoridades; sin embargo, a fuerza de tanta insistencia en el tema, ¿no se corre el riesgo de restarle importancia e inscribirlo en la rutina?

Igual situación ocurre con los hechos de sangre. La insistencia excesiva en informar sobre ellos, ¿no contribuye a su banalización?

Con la obsesión por lo negativo, ¿no se invisibiliza lo positivo? Tenemos logros en ciencia, tecnología, producción, que no sobresalen, opacados por la compulsividad necrológica con la violencia.

La negatividad informativa repercute sobre la legitimidad del sistema político, acrecienta el pesimismo e impide la construcción de ciudadanía.

La rendición de cuentas, la lucha contra la delincuencia y la corrupción son necesarias, pero no son los únicos problemas nacionales.

Los problemas macroeconómicos, productividad, infraestructura, educación, ecología deberían ocupar espacios importantes en la agenda informativa; las políticas públicas relacionadas con estos temas también son noticia.

Reducir las informaciones a la sangre y lo negativo impide ver otros temas y también siembra miedo, escepticismo y rechazo a las instituciones que, si bien tienen fallas, pueden ser mejoradas por la vía de la crítica constructiva.




martes, 19 de enero de 2016

LOS SERVIDORES DE LA MENTIRA

Por Salvador Freixedo 



No existe la prensa libre. Los periodistas tienen una libertad muy limitada. Están sujetos a la línea editorial del medio para el que trabajan y sirven a sus intereses. He aquí como ejemplo esta jugosa anécdota, que algunos conoceréis, sobre John Swinton, que fue redactor jefe del New York Times. En el transcurso de una cena organizada por periodistas en su honor, alguien propuso hacer un brindis por la prensa libre. Estas fueron sus palabras: “No existe la prensa libre. Ustedes lo saben tan bien como yo. Ninguno de ustedes se atreve a escribir su opinión honesta, y si lo hiciese, saben perfectamente que no saldría publicada. En el periódico donde trabajo me pagan por no decir mi opinión sincera. A ustedes les pagan por lo mismo que a mí, y si alguno estuviese tan loco como para decir sinceramente lo que piensa, pronto estaría buscando trabajo. Si yo me permitiese escribir lo que pienso de muchos temas, en 24 horas estaría despedido. El trabajo de los periodistas es destruir la verdad, es mentir descaradamente, es pervertir, es vilipendiar, es adular a los que tienen el dinero y es vender a su patria y a su raza para ganarse el pan. Ustedes lo saben igual que yo. Por lo tanto, ¿a qué viene este brindis por la prensa libre? Nosotros somos las herramientas y los siervos de los poderosos que están tras bastidores. Nosotros somos sólo muñecos; ellos tiran de los hilos y nosotros danzamos. Nuestros talentos, nuestras capacidades y nuestras vidas les pertenecen. Nosotros somos prostitutas intelectuales”.

Lamentable. ¿Pero son exageradas las palabras de Swinton? Yo creo que no. Los periodistas que nunca han tenido problemas es porque quizá nunca se han puesto a investigar un asunto de los denominados peligrosos, de esos que, de saberse la verdad podría perjudicar a alguna institución o persona de relevancia. O casos de implicación gubernamental en algún tema turbio. El mundialmente conocido “Octopus” de Casolaro es un ejemplo de lo que hablamos. El periodista apareció muerto en circunstancias extrañas cuando investigaba un caso de corrupción.

No siempre el castigo final es la “pena capital”. Cuando un periodista se vuelve demasiado revoltoso o le sale la vocación por los poros a la hora de investigar ciertos asuntos, se le retira, se le ningunea y se lo condena al olvido. Hay ciertos temas intocables, y los que se atreven a hacerlo deben pagar un alto peaje y arrastrar el sambenito colocado por el propio gremio.

No obstante, las auténticas víctimas son los ciudadanos, condenados a tragar la bazofia que cuidadosamente les cocinan todos los servidores del MAL con mayúsculas.
 

lunes, 21 de septiembre de 2015

Libertad de Prensa en el mundo 2015

Por Carlos Vilchez Navamuel



El último informe del 2015 sobre Libertad de Prensa publicado meses atrás, conocido como “La Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de Reporteros sin Fronteras (RSF) permite conocer la situación de 180 países en lo que concierne entre otros al pluralismo y la independencia de los medios de comunicación, la seguridad y el respeto a la libertad de los periodistas”.

Para quienes valoramos la Libertad como un todo en lo  Individual y en los Derechos Humanos, nos sentimos muy complacidos aquí en Costa Rica, nuestro país se ubicó entre los primeros 20 lugares con más Libertad de Prensa en el mundo, es bueno recordar que Costa Rica apareció en el 2014 en el puesto 21 y en el nuevo informe se sitúa en el puesto 16. Esperamos algún día estar entre los primeros lugares en Libertad Económica.

El sitio oficial de Reporteros sin Fronteras nos explica que “En la edición 2015 se encuentran a la cabeza, como de costumbre, tres países escandinavos: Finlandia, en primer lugar desde hace 5 años consecutivos, Noruega y Dinamarca. En el otro extremo, los tres países que enfrentan la peor situación son: Turkmenistán, Corea del Norte y Eritrea, ubicada en el lugar 180, entre 180 países. España se sitúa en el puesto 36 (+2), Francia ocupa el lugar 38 (+1), Estados Unidos el 49 (-3), Argentina el 57, Japón el 61 (-2), Brasil el 99 (+12), Rusia el 152 (-4), Irán el 173 (estable) y China el 176 (-1)”. http://index.rsf.org/#!/index-details

Sobre EEUU el mismo sitio nos dice que “El año 2014 estuvo marcado por la presión que ejercieron las autoridades sobre James Risen, periodista de The New York Times, para que revelara sus fuentes. Aunque el gobierno de Barack Obama dio marcha atrás en este caso, continúa su guerra contra la información en otros, como el de WikiLeaks”. Y en el caso de Rusia anda peor. “El Kremlin cierra más que nunca el cerco en torno a los periodistas críticos y se encarga seriamente de la censura. Cierres de sitios web informativos y despidos se encadenan, mientras que las autoridades “se apoderan” de los medios de comunicación independientes”.

La presentación destaca también algo que no nos extraña “En América del Sur, Venezuela queda en el puesto (137°) y pierde más de 20 lugares. La Guardia Nacional Bolivariana dispara a periodistas en las manifestaciones aunque se identifiquen claramente como tales. En Ecuador (108°, -13), la prometedora Ley Orgánica de Comunicación (LOC) mostró rápidamente sus limitaciones. La rectificación forzada de información se ha convertido en un modo de censura institucionalizada”. http://index.rsf.org/#!/presentation

martes, 23 de junio de 2015

“Imitemos la libertad nunca al totalitarismo”



Por Carlos Vilchez Navamuel



Don Emilio Bruce, columnista del periódico costarricense La República, escribió un  artículo magistral, lo tituló “Maldita prensa”.  El escrito fue publicado el 06-03-15, allí de una manera muy fina advierte y señala un mal que ha ido proliferando como mala hierba en nuestra región, se trata del cuestionamiento que hacen algunos presidentes a la prensa en general, recordamos por supuesto al finado Hugo Chávez,  Rafael Correa y por supuesto a Nicolás Maduro, jefes de Estado que hablan pestes de la prensa y que han tomado medidas drásticas en sus países.

Bruce nos dice entre otras cosas que “No escuchemos los cantos de sirena de aquellos países que han buscado silenciar a quienes desean hacer públicas sus censuras. Sobre el desarrollo de la libertad cabalga la democracia y el progreso de los pueblos. Sobre la supresión de las opiniones, sentimientos y preferencias de las sociedades, se cierne la noche de una era de degradación y totalitarismo”.

Y es que como sabemos, don Emilio al escribir esto, se estaba dirigiendo al presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, quién hace solo unos días se quejó del acoso mediático, el presidente escribió un artículo y se presentó en cadena de la radio y televisión.

En el texto el profesor se pregunta: “¿Qué es ese lamento de que me tratan mal en la prensa? ¡Sea hombre y trabe los dientes! ¡No afloje!, nos habrían dicho los mayores. Las críticas son indispensables para el gobernante. Los elogios generan conformidad y autocomplacencia. La crítica de hoy no es diferente de la de los pasados 12 años”.

Bruce añade: “Creo que los gobernantes, a semejanza de don José María Castro Madriz, deberían, lejos de criticar y de sumergirse en las teorías de la conspiración de la prensa, servirse de ella y estimular la misma. Imitemos la libertad nunca al totalitarismo. Más adelante don Emilio continua y dice “Sobre el desarrollo de la libertad cabalga la democracia y el progreso de los pueblos. Sobre la supresión de las opiniones, sentimientos y preferencias de las sociedades, se cierne la noche de una era de degradación y totalitarismo”. https://www.larepublica.net/app/cms/www/index.php?pk_articulo=533326808

Lleva razón don Emilio cuando dice IMITEMOS LA LIBERTAD NUNCA AL TOTALITARISMO, rechacemos las ideas estatistas, autoritarias o totalitarias, emulemos los modelos que han sido exitosos en otros países como Nueva Zelanda, Australia, Suiza o Suecia, no copiemos sistemas fracasados como lo han hecho en Cuba o Venezuela, ya sabemos cómo terminan.